Queremos experimentarlo. Queremos practicarlo. Queremos sentirlo. Queremos vivirlo… Arranca nuestra cuenta atrás para la Gran Final de la FLL. Tras conseguir empaquetar todo los materiales del equipo (no fue nada fácil…) salimos rumbo a Tenerife.
Durante el vuelo, ocurrieron las primeras anécdotas. Nuestro compañero Asier fue invitado a visitar la cabina… pero esto no es todo, ¡al aterrizar, el piloto nos deseó suerte a todo el equipo a través de la megafonía del avión!
Nada más llegar, nos dimos cuenta de que el bañador y las chancletas que con tanta ilusión habíamos metido en nuestras maletas, no iban a servir de nada. Al parecer, los navarricos nos hemos traído la lluvia con nosotros.
Esto se puede deber a que no somos los únicos navarros en la isla. Hoy por la tarde, hemos recibido la inesperada visita de Osasuna, que casualmente juega mañana aquí y se alojan en nuestro hotel. ¡¡Vaya sorpresa que nos ha preparado nuestro “jefe de prensa”!!
Pero no todo son alegrías. Una integrante del equipo, que prefiere permanecer en el anonimato, ha sido golpeada bruscamente por una puerta, impulsada por otro miembro del equipo, que también permanecerá en el anonimato.
Por lo demás, todo bien. Es momento de soñar...
Durante el vuelo, ocurrieron las primeras anécdotas. Nuestro compañero Asier fue invitado a visitar la cabina… pero esto no es todo, ¡al aterrizar, el piloto nos deseó suerte a todo el equipo a través de la megafonía del avión!
Nada más llegar, nos dimos cuenta de que el bañador y las chancletas que con tanta ilusión habíamos metido en nuestras maletas, no iban a servir de nada. Al parecer, los navarricos nos hemos traído la lluvia con nosotros.
Esto se puede deber a que no somos los únicos navarros en la isla. Hoy por la tarde, hemos recibido la inesperada visita de Osasuna, que casualmente juega mañana aquí y se alojan en nuestro hotel. ¡¡Vaya sorpresa que nos ha preparado nuestro “jefe de prensa”!!
Pero no todo son alegrías. Una integrante del equipo, que prefiere permanecer en el anonimato, ha sido golpeada bruscamente por una puerta, impulsada por otro miembro del equipo, que también permanecerá en el anonimato.
Por lo demás, todo bien. Es momento de soñar...